domingo, 6 de mayo de 2007

Crítica a la clase de filosofía

El señor Enrique P. Mesa nos da clase de filosofía. Durante esas clase los alumnos disfrutan dando esta asignatura por que es una de esas clases en la que uno no esta molesto de darla y disfruta aprendiendo cosas nuevas. Pero como todo, las clases del profesor Enrique Mesa tiene sus ventajas y sus inconvenientes.

Entre sus ventajas cabe destacar como lleva la clase, la lleva de una manera en la que uno nunca uno se aburre debido a comentarios graciosos e ingeniosos, también debido a que cuenta muchas anécdotas y relatos. En cuanto a la forma de explicación nos lo da todo en una hoja y luego explica cada apartado en la pizarra y expone siempre ejemplos para que lo aprendamos mejor, además es muy consistente en saber si se ha sabido o no y siempre hace un resumen de la clase anterior. Y en cuanto exámenes hace tres tipos uno de tipo teórico que es en plan opción múltiple, otro llamado practico donde se hace preguntas relacionadas con el tema y por último uno de materiales donde hay que leerse un libro y se hacen preguntas sobre el tema ,el libro, y hay que relacionarlas.
Otra ventaja es la flexibilidad a la hora de elegir fechas de exámenes puesto que te da tres días lectivos para que coloques la fecha del examen.

Entre las desventajas colocaría esa nota superior al 4,5 e inferior al 5 donde el profesor suspendería a ese alumno con un 4.Por que el alumno que haga sacado un 4,9 sabe casi lo mismo que el que haga sacado un 5 y por ese motivo me gustaría proponer que los alumnos cuyas notas estén entre el 4.5 y el 5 tenga un examen extra antes de la evaluación. Otra inconveniente es que el señor Enrique pide respuestas demasiado completas y es casi, imposible obtener la máxima puntación aunque esto también puede venir bien a la hora de la universidad.

Para mi las clases de filosofía son las mejores y no es por hacer la pelota ni nada de eso, si no por que me lo paso bien y disfruto aprendiendo y yo pienso que el resto de mis compañeros opinan lo mismo.
Saludos Enrique P. Mesa.